Estoy muy acostumbrada a ver por casa muchas de las piezas de cerámica que hice en aquel curso del colegio y jarrones con flores, a mi madre le encantan, por eso os voy a hablar de una firma que rompe con la idea de regalar siempre lo mismo a los novios.
No me parece un disparate regalar una pieza de decoración a los novios, de hecho me parece hasta original e incluso práctico ( siempre y cuando no sea un juego de cacerolas, algo muy típico). Por eso, el otro día indagando sobre regalos originales para unos novios, me acordé de Sezè Estudio.
Celia Somoza es quien está detrás de Sezè y de cada pieza que aúna emprendimiento, artesanía, amor y arte. La verdad que para mí no hay nada mejor que regalar una pieza distinta a lo convencional y creo que una pieza de Sezè debería de estar en todas las listas de boda.
La historia de Sezè es la historia de cómo un hobby se puede convertir en una profesión. La trayectoria de Celia comienza tras leer un libro sobre cerámica japonesa y se lanzó a potenciar su faceta creativa creando la firma en la que se trabaja tanto con exclusividad como la individualidad.
Inspirada en el arte del siglo XX y en artistas como Picasso o Mattise, Celia crea piezas coloristas, con un toque mediterráneo, naive, pero sobre todo muy naturales.
Pero lo que más me gusta de Sezè es que cada objeto tiene una historia detrás y su valor prima sobre todas las cosas, por eso regalar una pieza para poder guardarla toda la vida siempre es un acierto seguro.
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