Hay fotografías que se quedan en la retina años y años. Las del fotógrafo Patrick Demarchelier son de esas fotografías.
Patrick Demarchelier ha fotografiado desde a una jovencísima Kate Moss en los años 90 hasta a Lady Di junto a sus hijos pasando por ese cameo que realizó en la película Sexo en Nueva York retratando a Carrie Bradshaw vestida de Lacroix, Oscar De La Renta o Lanvin para ese reportaje ficticio sobre casarse a los 40.
El fotógrafo francés lleva dedicándose a la fotografía desde finales de los años 70 convirtiéndose en uno de los fotógrafos de renombre en el panorama de la moda. Ha trabajado para Vogue y Vanity Fair.
A lo largo de su trayectoria me han llamado la atención varias fotografías de algunos reportajes publicados en Vogue y que todo el mundo debería de conocer. Fotografías de novias o que a opinión personal, son novias. Como soy muy poco clásica, más bien atípica o poco convencional, el hecho de que Patrick Demarchelier fotografíe a unas novias que no son las típicas novias me encanta.
Algunas de las novias de Patrick Demarchelier parecen querer darse a la fuga y correr lo más rápido posible. Otras parecen estar tristes, haber finalizado la fiesta y han sido retratadas durante los primeros minutos de esa resaca post boda. Ha fotografiado a novias con prisa, a novias minimalistas y con pamela XXL, a las novias rock y pensativas de Vera Wang y a novias para el New Couture de Dior pisando unos cristales rotos o a la novia con el vestido de color champagne satinado en los interiores del Palacio de Versalles.
En definitiva, novias que todo el mundo debería de ver.
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